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sábado, 16 de octubre de 2021

FILIPENSES 2:7,8 EN CRISTO

  • Pero cuantas cosas eran para mí ganancia, las he estimado como pérdida por amor de Cristo. 
  • Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a Cristo. 
  • Oh mi Cristo, dame de tu bendita gracia, para cumplir el principio bíblico.
  • Y no permitas nunca, oh Señor, que contriste a tu Santo Espíritu. 

  • Oh Cristo Redentor, 
  • y fue tu muerte, y muerte de cruz la que venció al imperio de la muerte.
  • Tú, oh Rey de la gloria, ofrendaste tu excelso amor, arrostrando con inconmensurable piedad el vil desamor.
  • Y al pronunciar, instantes antes de expirar la gloriosa frase: Consumado es; a todos los pecadores del mundo, redimiste y justificaste. 

  • Oh Cristo Jesús, 
  • el Evangelio de la gracia es profusamente predicado; pero, ¿no existe un fingimiento tácito, por parte de los mismos que lo predican a los cuatro vientos? 
  • ¿Es tan difícil burlar a las tinieblas, para someterse, oh Señor Omnipotente, a tu majestuosa luz?
  • ¿O es qué nuestra precaria mente, no es capaz de discernir, oh Rey de reyes, tus pensamientos eternos?

  • Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar. 
  • Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. 
  • Oh gran Yo Soy, a tu absoluta dependencia, el ser humano no se quiere doblegar;
  • pero, entonces, ¿quién su vida salvará?

  • Jesús, asevera: Porque el Hijo del Hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles, y entonces pagará a cada uno conforme a sus obras. 
  • De cierto os digo que hay algunos de los que están aquí, que no gustarán la muerte, hasta que hayan visto al Hijo del Hombre viniendo en su reino.
  • Oh Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo, nada nos es oculto de tus buenas nuevas.
  • ¿A qué se debe la demora, para asumirlas con sumo celo?
  •                     Paz de Cristo 

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