NADA SUSTENTA MI VIDA, SINO TU PRESENCIA, OH CRISTO

• Porque así dijo el Alto y Sublime, el que habita la eternidad, y cuyo nombre es el Santo: Yo habito en la altura y la santidad, y con el quebrantado y humilde de espíritu, para hacer vivir el espíritu de los humildes, y para vivificar el corazón de los quebrantados. 
• Porque no contenderé para siempre, ni para siempre me enojaré; pues decaería ante mí el espíritu, y las almas que yo he creado.
• Oh mi Cristo, todos tus dignos hijos, esperan ser en el día postrero arrebatados;
• y será únicamente el discípulo incorruptible de tu amada Iglesia, el que por la excelsa diestra será glorificado. 
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• La Biblia dice: Pues mirad, hermanos, vuestra vocación, que no sois muchos sabios según la carne, ni muchos poderosos, ni muchos nobles; sino que lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte; y lo vil del mundo y lo menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, a fin de que nadie se jacte en su presencia.
• Mas por él estáis vosotros en Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría, justificación, santificación y redención; para que, como está escrito: El que se gloría, gloríese en el Señor. 
• Oh Rey de reyes, por tu misericordia de excelencia,
• hemos conocido al que habita en la luz inaccesible del sagrado amor.
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• La Biblia constata: ¿A dónde me iré de tu Espíritu? ¿Y a dónde huiré de tu presencia? Si subiere a los cielos allí estás tú; y si en el Seol hiciere ni estrado, he aquí, allí tú estás. 
• Si tomaré las alas del alba y habitare en el extremo del mar, aún allí me guiará tu mano, y me asirá tu diestra. 
• Oh Sumo Creador, tu ubicuidad es nanifiesta en la más grande, y también en lo infinitesimal;
• dando a conocer, que tuyos son los cielos y la tierra.
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• La Biblia enfatiza: Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.
• El viento sopla de donde quiere, y oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del Espíritu. 
• En el mundo, los incredulos de tu santo nombre dudan;
• porque su endurecido corazón no loa al Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo. 
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• La Biblia asevera: Y éste es su mandamiento: Que creamos en el nombre de su Hijo Jesucristo, y nos amemos unos a otros como nos lo ha mandado. 
• Y el que guarda su mandamiento, permanece en Dios, y Dios en él. Y en esto sabemos que él permanece en nosotros, por el Espíritu que nos ha dado.
• Oh Alfa y Omega, con tu luz admirable, nuestra vida has alumbrado.
• Y no será, sino por la majestuosidad de tu nombre, oh Señor, por el que cada uno de tus consagrados siervos, será santificado. 
•                       Paz de Cristo