- Oh mi Cristo,
- por tu obediencia al Padre, te humillaste hasta la muerte, y muerte de cruz.
- Y verbalizaste: Consumado es;
- para acto seguido, entregar a Dios tu espíritu.
- Oh Hijo del Hombre,
- los principios de la libertad humana son inherentes a su santidad.
- Y es por amor a tu santo nombre,
- cuando damos cumplimiento a la bíblica verdad.
- Oh Cristo Redentor,
- tu excelsa libertad en la cruz del Calvario, fue reconciliarnos con el Padre.
- Y nadie, sino Tú, oh Rey de la gloria, dio tal inmensidad amor,
- que traspasó lo inconmensurable.
- Oh Alto y Sublime,
- tu perfecta justicia, es la senda por la que toda la humanidad ha de caminar.
- Pero su veleidoso corazón es engañoso y rebelde;
- y tus conocimientos sagrados, oh Señor, no puede ni sabe aceptar.
- Oh Santo de Israel,
- tu piedad, hemos de ponerla por obra para salvar nuestra alma.
- Y con el frontispicio de la fe,
- agradaremos al Omnipotente Señor, que de gracia nos ama.
- Paz de Cristo
domingo, 6 de noviembre de 2022
LA OBEDIENCIA A LOS PRECEPTOS BIBLICOS,TE HARÁ LIBRE EN CRISTO
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