Powered By Blogger

domingo, 23 de julio de 2023

SALMO 143:1,2 EN CRISTO

  • Oh Jehová, oye mi oración, escucha mis ruegos; respóndeme por tu verdad, por tu justicia.
  • Y no entres en juicio con tu siervo; porque no se justificará delante de ti ningún ser humano.
  • Oh mi Cristo, es en la senda de tu excelsa gloria,
  • donde no se puede ocultar nuestro espíritu vano.

  • Porque ha perseguido el enemigo mi alma; ha postrado en tierra mi vida; me ha hecho habitar en tinieblas como los ya muertos.
  • Y mi espíritu se angustió dentro de mí; está desolado mi corazón. 
  • Oh Rey de reyes, ¿habrá 
  • alguna dificultad para ti, en dar vida al valle de los huesos secos? 
  • ¿O será tu sola potestad, la que dirima su conveniencia a la sazón?

  • Me acordé de los días antiguo; meditaba en todas tus obras; reflexionaba en las obras de tus manos.
  • Extendí mis manos a ti, mi alma a ti como la tierra sedienta.
  • Oh Sumo Alfarero, en la sobrenatural rueda, moldeaste con primor los que ni siquiera parecían ser vasos;
  • pero Tú, oh Señor, los transformaste, para de gracia darles vida nueva.

  • Respóndeme pronto, oh Jehová, porque desmaya mi espíritu; no escondas de mí tu rostro, no venga yo a ser semejante a los que descienden a la sepultura.
  • Hazme oír por la mañana tu misericordia, porque en ti he confiado; Hazme saber el camino por donde ande, porque a ti he elevado mi alma.
  • Oh Hijo del Hombre, ¿será factible ver la eternidad, añadiendo un palmo a mi estatura?
  • O indefectiblemente, perseveraré en la búsqueda de tu rostro para ser salvo, oh gran Yo Soy, y así en el día postrero, por tu grandiosa piedad podré morar en tu gloria santa.
  •  
  • Líbrame de mis enemigos, oh Jehová; en ti me refugio.
  • Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios; tu buen espíritu me guie a tierra de rectitud.
  • Oh Altísimo Señor Jesucristo, 
  • la angostísima senda, me llevará a ver indubitablemente tu admirable y majestuosa luz.

  • Por tu nombre, oh Jehová, me vivificarás; por tu justicia sacarás mi alma de angustia. 
  • Y por tu misericordia disiparás a mis enemigos, y destruirás a todos los adversarios de mi alma, porque yo soy tu siervo. 
  • Oh gran Dios, llena mi ser del radiante mediodía; 
  • para que tu fortaleza sea mi gozo, sin que medie el terrenal tiempo. 
  •               Paz de Cristo 

No hay comentarios:

Publicar un comentario