SALMO 117:1,2 EN CRISTO

• Alabad a Jehová, naciones todas; pueblos todos alabadle. 
• Porque a engrandecido sobre nosotros su misericordia, y la fidelidad de Jehová es para siempre. Aleluya.
• Oh mi Cristo, de tu excelsa diestra estaremos asidos eternamente;
• y nada nos apartará de ella. 
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• La Biblia dice: Te alabaré, oh Jehová Dios mío, con todo mi corazón, y glorificaré tu nombre para siempre. 
• Porque tú misericordia es grande para conmigo, y has librado mi alma de las profundidades del Seol.
• Oh Altísimo Redentor, en la cruz del Calvario tu vida nos ofrendaste;
• y antes de expirar, derramaste sobre la inicua humanidad tu majestuoso perdón.
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• La Biblia enseña: Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado.
• Acerquémonos, pues, confiadamente al trono se la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro. 
• Oh Cristo Jesús, en tu regazo nos has guardado, 
• para librarnos del oprobio.
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• La Biblia enfatiza: Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano. 
• Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar. 
• Oh Santo de Israel, en tu  nombre que es sobre todo nombre, nuestra alma ha confiado;
• porque en tu manifestación de gloria, a nuestro pétreo corazón has podido amar.
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• La Biblia asevera: Bendice, alma mía, a Jehová, y no olvides ninguno de sus beneficios. 
• Él es quien perdona todas tus iniquidades, el que sana toda tus dolencias; el que rescata del hoyo tu vida, el que te corona de favores y misericordias; el que sacia de bien tu boca de modo que te rejuvenezcas como el águila. 
• Oh Sumo Creador, porque somos tus genuinos hijos,
• haz que en tu bendita gloria, viva gozosa nuestra alma.
•                       Paz de Cristo