SALMO 37:39,40 EN CRISTO

• Pero la salvación de los justos es de Jehová, y él es su fortaleza en el tiempo de la angustia.
• Jehová los ayudará y los librará; los libertará de los impíos, y los salvará, por cuanto en él esperan.
• Oh mi Cristo, inexpugnable es tu diestra, para el que en ella se refugia.
• Los que se guardan en tu majestuoso nombre, oh Señor, siempre prosperan.
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• Oh Soberano Redentor, 
• la impiedad es recurrente en el profano, ante la consumación de tu gloriosa obra en la cruz del Calvario. 
• Y es que, las herejías que profería el escarnecedor,
• no fueron obstáculo, para que en el Lugar Santísimo, se arrepintiera de sus abyectos pecados con quebrantamiento de espíritu, el más vil sicario.
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• Oh Sumo Hacedor,
• consubstancial a la pureza es tu universal creación.
• Y en la senda sagrada de su amor,
• ha hecho propicio el encuentro más sublime, con nuestro desvirtuado corazón.
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• Oh Santo de Israel, 
• El conocimiento de la verdad, nos ha sido revelado en tu Sagrada Escritura. 
• Y hemos de entender a priori, que nuestra humana racionalidad es diametralmente opuesta a la fe.
• Y es que, oh Cristo Jesús, tus sobrenaturales milagros son inescrutables, para la idiosincrasia de la mente humana en su primigenia estructura. 
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• Oh Alfa y Omega, 
• si no guardamos la máxima solemnidad en la lectura de la Sagrada Palabra; estamos sujetos a que el maligno se involucre en distorsionarla con nuevas e irreverentes versiones.
• Porque, oh Rey de reyes y Señor de señores, hasta la ultima tilde y jota harás que se cumpla; 
• para que sobre nuestra alma, sean derramadas tus eternas bendiciones. 
•                  Paz de Cristo