- Jesús, dijo: Las zorras tienen guaridas, y las aves del cielo nidos; mas el Hijo del Hombre no tiene donde recostar su cabeza.
- En tu santísimo camino, manifestaste siempre la gloria, oh Cristo Jesús.
- Y en las buenas nuevas de salvación eterna que predicaste a los perdidos, oh mi Cristo, tus siervos tuvimos la meridiana certeza,
- de ver tu admirable luz.
- Oh Cristo Redentor,
- en la crucifixión más execrable, diste tu vida por las hordas que te vituperaban y escarnecían.
- Pero tu preciosa sangre derramada, hizo el universal pacto de amor,
- que los inicuos no merecían.
- Oh Santo de Israel,
- tu pensamiento de eternidad no era inteligible para las farisaicas mentes.
- Y tus señales y prodigios también los tergiversaron; porque en tu majestuoso nombre nunca tuvieron fe,
- los perversos e in solemnes.
- Oh Sumo Hacedor,
- la incomparable belleza de tus universales mimbres nos sustenta.
- Sin embargo, el obsolescente discernimiento sobre tu inconmensurable amor,
- desvirtúa a los inmundos y no lo contemplan.
- Oh gran Yo Soy,
- discípulos somos de tu gracia.
- Y moradores del paraíso seremos en un eterno hoy;
- porque nos guía tu excelsa diestra.
- Paz de Cristo
sábado, 8 de enero de 2022
EN LAS CALLES DEL MUNDO PREDICASTE TÚ, OH CRISTO
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