- Jesús, dijo: He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.
- Al que venciere, le daré que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono.
- El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.
- Oh mi Cristo,
- tu benevolencia, a los que creemos en tu glorioso nombre, nos regocija hasta el extremo;
- porque del Eterno, recibimos las poderosas palabras sabias.
- Jesús, enseña: De cierto, de cierto os digo: Yo soy la puerta de las ovejas.
- Todos los que antes de mí vinieron, ladrones son y salteadores; pero no los oyeron las ovejas.
- Oh Altísimo Jesucristo, de tu eterno santuario descendiste para darnos las buenas nuevas;
- pero los que plantaron la cizaña entre el trigo, hicieron caso omiso de tus espirituales enseñanzas.
- Jesús, constata: Yo soy la puerta; el que por mí entrare será salvo; y entrará y saldrá, y hallará pastos.
- El ladrón no viene sino para hurtar, matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.
- Oh Rey de reyes, por la Sagrada Palabra, y no por obra de varón, han sido engendrados los santos;
- porque al recibir de tu gracia, oh Señor, concernidos fueron en la radiante y celestial excelencia.
- Jesús, incide: Yo soy el buen pastor, el buen pastor su vida da por las ovejas.
- Mas el asalariado, y que no es el pastor, de quien no son propias las ovejas, ve venir al lobo y deja las ovejas y huye, y el lobo arrebata a las ovejas y las dispersa.
- Así que el asalariado huye, porque es asalariado, y no le importan las ovejas.
- Oh Santo de Israel, del viento de Sion son las loas más bellas;
- y ninguno de tus consagrados siervos tiene dudas sobre su genuina certeza,
- porque de tu excelsa diestra percibieron las gloriosas promesas.
- Jesús, asevera: Yo soy el buen pastor; y conozco mis ovejas, y las mías me conocen, así como el Padre me conoce, y yo conozco al Padre, y pongo mi vida por las ovejas.
- También yo tengo otras ovejas que no son de este redil; aquéllas también debo traer, y oirán mi voz; y habrá un rebaño y un pastor.
- Por eso me ama el Padre, porque yo pongo mi vida, para volverla a tomar.
- Nadie me la quita, sino que yo mismo la pongo. Tengo poder para ponerla, y tengo poder para volverla a tomar. Este mandamiento recibí de mi Padre.
- Oh Fiel y Verdadero, manifiesta es tu gloria en mis predicaciones poéticas.
- Y únicamente el que recibe tu excelso amor,
- oh Rey de la gloría, es el que no tiene impedimento para amar;
- porque en la rectitud del perfecto arado, se afirma eternamente.
- Paz de Cristo
viernes, 19 de agosto de 2022
DE BIENAVENTURADA ESPERANZA HAS REVESTIDO A LA HUMANIDAD, OH CRISTO
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario