- Oh mi Cristo,
- la fe en precario, no nos permite ser hacedores de la Sagrada Palabra.
- Y es el poder del Espíritu,
- el que nos ha de llevar a la única verdad santa.
- La Biblia dice: Pero cuantas cosas eran para mí ganancia, las he estimado como pérdida por amor a Cristo.
- Y ciertamente, aun estimo todas las cosas como pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor; por amor del cual lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a Cristo, y ser hallado en él, no teniendo mi propia justicia, que es por la ley, sino la que es por la fe de Cristo, la justicia que es de Dios por la fe; a fin de conocerle, y el poder de su resurrección, y la participación de sus padecimientos, llegando a ser semejante a él en su muerte, si en alguna manera llegase a la resurrección de entre los muertos.
- No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea perfecto; sino que prosigo, por ver si logro asir aquello para lo cual fui también asido por Cristo Jesús.
- Oh Altísimo,
- nada anhelamos más que ser tus perfectos siervos,
- para recibir por fe la corona de gloria en plenitud.
- La Biblia enseña: Nosotros, judíos de nacimiento, y no pecadores entre los gentiles, sabiendo que el hombre no es justificado por las obras de la ley, sino por la fe de Jesucristo, nosotros también hemos creido en Jesucristo, para ser justificados por la fe de Cristo y no por las obras de la ley, por cuanto por las obras de la ley nadie será justificado.
- Y si buscando ser justificados en Cristo, también nosotros somos hallados pecadores, ¿es por eso Cristo ministro de pecado? En ninguna manera.
- Oh Cristo Redentor, para el discípulo consagrado,
- su fe cumple el propósito que con paciencia espera.
- La Biblia constata: Porque si las cosas que destruí, las mismas vuelvo a edificar, transgresor me hago.
- Porque yo por la ley soy muerto para la ley, a fin de vivir para Dios.
- Con Cristo estoy juntamente crucificado, y ya no vivo yo, mas vive Cristo en mí; y lo que ahora vivo en la carne, lo vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí.
- No desecho la gracia de Dios; pues si por la ley fuese la justicia, entonces por demás murió Cristo.
- Oh Santo,
- en tu majestuoso nombre estamos confiados.
- Tú eres el principio y el fin,
- según se hace constar en el Sagrado Escrito.
- La Biblia enfatiza: ¡Oh gálatas insensatos! ¿quién os fascinó para no obedecer a la verdad, a vosotros ante cuyos ojos Jesucristo ya fue presentado claramente entre vosotros como crucificado?
- Esto sólo quiero saber de vosotros: ¿Recibisteis el Espíritu por las obras de la ley, o por el oír con fe?
- ¿Tan necios sois? ¿Habiendo comenzado por el Espíritu, ahora vais a acabar por la carne?
- ¿Tantas cosas habéis padecido en vano? si es que realmente fue en vano.
- Aquel, pues, que os suministra el Espíritu, y hace maravillas entre vosotros, ¿lo hace por las obras de la ley, o por el oír con fe?
- Oh Cordero inmolado,
- tu Espíritu nos ha permitido ver lo que el mundo no ve.
- Oh Alto y Sublime,
- Tú, de Israel eres el Santo;
- y el que en la cruz del Calvario, dijo: Consumado es.
- Paz de Cristo
sábado, 27 de agosto de 2022
NEGARSE A SÍ MISMO, TE PERMITIRÁ SER HACEDOR DE LA PALABRA EN CRISTO
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