SALMO 78:59-61 EN CRISTO

• Lo oyó Dios y se enojó, y en gran manera aborreció a Israel. 
• Dejó, por tanto, el tabernáculo de Silo, la tienda en que habitó entre los hombres, y entregó a cautiverio su poderío, y su gloria en mano del enemigo.
• Oh mi Cristo, tu pueblo elegido, obvió la sobrenatural fe;
• y estrechó lazos con el vil maligno.
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• La Biblia dice: Entregó también a su pueblo a espada, y se irritó contra su heredad.
• El fuego devoró a sus jóvenes, y sus vírgenes no fueron loadas en cantos nupciales. 
• Oh Alto y Sublime, horrenda cosa hacen los que ponen en entredicho tu grandiosa piedad;
• para hacerse eco de infundios execrables.
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• La Biblia constata: Sus sacerdotes cayeron a espada, y sus viudas no hicieron lamentación.
• Entonces despertó el Señor como quien duerme, como un valiente que grita excitado del vino, e hirió a sus enemigos por detrás; les dio perpetua afrenta.
• Oh Rey de reyes, clamamos para que tu ira revierta en bendición;
• y sea nuestro eterno refugio, la misericordia de tu excelsa diestra.
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• La Biblia enfatiza: Desechó la tienda de José, y no escogió la tribu de Efraín, sino que escogió la tribu de Judá, el monte de Sion, al cual amó. 
• Edificó su santuario a manera de eminencia, como la tierra que cimentó para siempre.
• Oh Santo de Israel, el siervo que clamó a tu majestuoso nombre con fe, ese si te conmovió, 
• para que tu gloriosa bendición le reconfortare.
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• La Biblia enseña: Eligió a David su siervo, y lo tomó de las majadas de las ovejas; de tras las paridas lo trajo, para que apacentase a Jacob su pueblo, y a Israel su heredad.
• Y los apacentó conforme a la integridad de su corazón, los pastoreó con la pericia de sus manos.
• Oh Alfa y Omega, tu Sagrada Escritura nos da el conocimiento de la excelsa libertad;
• porque en el día postrero, Tú arrebatarás indefectiblemente, oh Señor, a la perfecta congregación de tus verdaderos santos.
•                    Paz de Cristo