Powered By Blogger

jueves, 11 de agosto de 2022

SÉ UNO EN CRISTO

  • Jesús les respondió: Os lo he dicho, y no creéis; las obras que yo hago en nombre de mi Padre, ellas dan testimonio de mí; pero vosotros no creéis, porque no sois de mis ovejas, como os he dicho.
  • Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, y yo les doy vida eterna, y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano.
  • Mi Padre que me las dio, es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre. 
  • Yo y el Padre uno somos.
  • Oh mi Cristo, 
  • el verdadero regocijo es en tu santo nombre; porque en la gracia recibida está concernido el que por  fe se ha consagrado. 
  • La bendición gloriosa únicamente del cielo parte;
  • y es que, por las señales y milagros Cristocéntricos siempre fuimos guiados. 

  • Jesús, enseña: Si me amáis guardad mis mandamientos. 
  • Y yo rogaré al Padre, y os dará otro consolador, para que esté con vosotros para siempre: el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará con vosotros.
  • Oh Cristo Jesús, de Sion vendrán los espirituales vientos,
  • que nos anunciarán los conocimientos sobrenaturales más prodigiosos. 

  • Jesús, constata: No os dejaré huerfanos; vendré a vosotros. 
  • Todavía un poco, y el mudo no me verá más; pero vosotros me veréis; porque yo vivo, vosotros también viviréis. 
  • En aquel día vosotros conoceréis que yo estoy en mi Padre, y vosotros en mí, y yo en vosotros.
  • El que tiene mis mandamientos, y los guarda, ese es el que me ama; y el que me ama, será amado por mi Padre, y yo le amaré, y me manifestaré a él. 
  • Oh Alto y Sublime, de tu presencia testificamos tus genuinos siervos;
  • y a todos los que se os ha sido revelado su glorioso nombre, también lo percibiréis.
  • Nada os será ajeno de los sobrenaturales eventos,
  • si los veis con los ojos de la fe.

  • Jesús, incide: El que  me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada con él. 
  • El que no me ama, no guardará mis palabras; y la palabra que habéis oído no es mía, sino del Padre que me envió. 
  • Os he dicho estas cosas estando con vosotros. 
  • Más el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho. 
  • Oh Santo de Israel, 
  • desde antes de la fundación del mundo, nuestro corazón a tus majestuosos pies se postró.
  • Y esta adoración quitará toda tribulación de tus auténticos siervos;
  • por cuanto la carne fue sepultada en el bautismo. 

  • Jesús, enfatiza: La paz os dejó, mi paz os doy; yo nos os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo.
  • Habéis oído que yo os he dicho: Voy y vengo a vosotros. Si me amarais, os habríais regocijado, porque he dicho que voy a Padre; porque el Padre mayor es que yo.
  • Y ahora os lo he dicho antes que suceda, para que cuando suceda creáis.
  • No hablaré ya mucho con vosotros; porque viene el príncipe de este mundo, y él nada tiene en mí. 
  • Oh Sumo Alfarero, 
  • en tu rueda, al que ha querido ser tu hijo lo has hecho de nuevo.
  • Y seguirá con denuedo, oh Señor, tus huellas santísimas e inmarcesibles,
  • hasta el día del fin.
  •                   Paz de Cristo 

No hay comentarios:

Publicar un comentario