¿QUÉ TE AGRADA MÁS? LA INMUNDICIA DEL DIABLO O LA GLORIA EN CRISTO

• Oh mi Cristo, 
• el mundo da su beneplácito a lo perverso; porque va en pos de la mentira. 
• Y es que, en la gloria del Santo Espíritu, 
• solo obra la bendición desmedida. 
• 
  
• Oh Cristo Redentor, 
• en tu abominable ajusticiamiento del Calvario, se dio toda preponderancia a las hordas escarnecedoras, y ninguna a la todopoderosa gloria.
• Tu excelsa piedad, oh Señor, 
• nunca estuvo en el séptico pensamiento de la chusma; y tus adoradores gracias te damos, por tu gloriosa victoria. 
• 
  
• Oh Cristo Jesús, 
• ¿qué distinción hace el ser humano en su mente; entre tocar tu sagrado manto, y tocar los perniciosos trapos de inmundicia?
• Sí, el más grande obstáculo, es para el que está sumido en la completa obscuridad, y no puede ver, oh Rey de reyes, tu majestuosa luz;
• porque se lo impide su estulticia. 
• 
  
• Oh Santo de Israel, 
• la fe es una enseñanza recurrente en tus pasajes bíblicos.
• Porque los que hemos creído en Él, 
• de su eterno poder estamos concernidos. 
• 
  
• Oh Alfa y Omega, 
• tu amor, gozo y paz nos dan la visión de la nueva Jerusalén. 
• Y únicamente de tus genuinos siervos, 
• será la eterna fortaleza del Edén.
•                   Paz de Cristo