EL CULMEN ES AGRADARTE, OH CRISTO

• La Biblia dice: Reuníos, y venid; juntos todos los sobrevivientes de entre las naciones. No tienen conocimiento aquellos que erigen el madero de su ídolo, y los que ruegan a su dios que no salva.
• Proclamad, y hacedlos acercarse, y entren todos en consulta; ¿quién hizo oír esto desde el principio, y lo tiene dicho desde entonces, sino yo Jehová? Y no hay más Dios que yo; Dios justo y Salvador; ningún otro fuera de mí. 
• Oh mi Cristo, Tú eres el Padre Eterno manifestado en carne; y el único Dios que puede salvar nuestra alma.
• Tú eres, oh Cristo Jesús, el primero y el último, el principio y el fin.
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• La Biblia enseña: Mirad a mí, y sed salvos, todos los términos de la tierra, porque yo soy Dios, y no hay más. 
• Por mí mismo hice juramento, de mi boca salió palabra en justicia, y no será revocada: Que a mí se doblará toda rodilla, y jurará toda lengua.
• Oh Fiel y Verdadero, todos los que están en los cielos, y en la tierra y debajo de la tierra, al escuchar tu majestuoso nombre, genuflexos te adorarán;
• porque escrito está en la Sagrada Palabra. 
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• La Biblia asevera: Y se dirá de mí: Ciertamente en Jehová está la justicia y la fuerza; a él vendrán, y todo los que contra él se enardecen serán avergonzados. 
• En Jehová será justificada y se gloriará toda la descendencia de Israel. 
• Oh Altísimo Señor Jesucristo, todos los que hayan creído fervientemente en tu glorioso nombre serán bienaventurados;
• porque Tú eres el autor y consumador de la fe. 
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• La Biblia enfatiza: Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.
• Por la fe Noé, cuando fue advertido por Dios acerca de cosas que aún no se veían, con temor preparó el arca en que su casa se salvase; y por esa fe condenó al mundo, y fue hecho heredero de la justicia que viene por la fe.
• Oh Santo de Israel, a los que persistentemente en buscar tu rostro se afanan,
• les has revelado espiritualmente tu santo nombre.
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• Oh Todopoderoso Señor y Salvador Jesucristo, 
• Tú eres la imagen del Dios invisible.
• Y das, oh Señor, cumplimiento al precepto bíblico, de que el ser humano está hecho a tu imagen y semejanza como dice el Sagrado Escrito;
• y es que, su eterno texto es glorioso e inconmovible. 
•                    Paz de Cristo