- Aborrezco a los hombres hipócritas; mas amo tu ley.
- Mi escondedero y me escudo eres tú; en tu palabra he esperado.
- Oh mi Cristo, esperaré en los favores y misericordias, que derramarás sobre mí hoy;
- para ser en tu glorioso nombre santificado.
- La Biblia dice: Apartaos de mí, malignos, pues yo guardaré los mandamientos de mi Dios.
- Susténtame conforme a tu palabra, y viviré; y no quede yo avergonzado de mi esperanza.
- Oh Rey de reyes, por tus buenas nuevas de salvación eterna hemos sido preservados,
- de la mentira de diablo, que enmascara en su asechanza.
- La Biblia enseña: Sostenme, y seré salvo, y me regocijaré siempre en tus estatutos.
- Hollaste a todos los que se desvían de tus estatutos, porque su astucia es falsedad.
- Oh Sumo Hacedor, nunca te agradó de los fatuos,
- su despiadada arbitrariedad.
- La Biblia enfatiza: Como escoria hiciste consumir a todos los impíos de la tierra; por tanto yo he amado tus testimonios.
- Mi carne se ha estremecido por temor de ti, y de tus juicios tengo miedo.
- Oh Hijo del Hombre, Tú has echado si remisión de los seres humanos que han creído en tu santo nombre sus maléficos demonios,
- para que la manifestación de gloria sea del Eterno.
- Oh Cristo Altísimo,
- Tú nos has mostrado el Camino de Santidad.
- Y es en el Lugar Santísimo,
- donde al corazón contrito y humillado le será revelada la única verdad.
- Paz de Cristo
miércoles, 18 de mayo de 2022
SALMO 119:113,114 EN CRISTO
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