LA UNICIDAD ES CRISTO

Oh Cristo, indisoluble 
eres en tu única Divinidad. 
Oh Señor inconmovible, 
de la Sagrada Unicidad. 

Oh Cristo Jesús, en tu Omnipresencia, 
se ve reflejada la Creación. 
Revelada Omnisciencia, 
de sublime Redención. 

Oh Señor Omnipotente, 
en el Nombre de Jesús, 
te manifestaste en carne. 
Y fueron transformadas las tinieblas, 
en Deidad de inconmensurable plenitud. 

Oh Salvador, descendiste del Cielo, 
para deshacer las obras del maligno. 
Redimiste al ser humano del oprobio.
Y en el Nombre de Jesús, fui librado de las lugubres mazmorras de la muerte, transformándome en tu discípulo digno.

Oh Redentor, la Tierra, fue convertida en tinieblas por el ser humano, en su disolución. 
Oh Todopoderoso Señor, te hiciste carne de pecado hasta la muerte, y muerte de cruz. 
Guardados en tu Unicidad de Santificación, 
nos transformaste en hijos de Luz. 

Oh Fiel y Verdadero, eres el Lugar Santísimo de la Fe. 
Oh Cordero Inmolado, 
dijiste al expirar tu última frase: Consumado es. 
Y en un sepulcro nuevo, fuiste inhumado. 

A la muerte, oh Señor Jesús, venció tu muerte. 
La arrostraste de frente, en una gran batalla, sin compasión. 
 Y al tercer día, rendido en su asedio, al maléfico Hades sepultaste. 
Oh Señor Jesucristo de Unicidad, eres el gran Yo Soy de la Salvación. 
                               Paz de Cristo